Pete Kelly's Blues: carreteras secundarias
Casi no me acuerdo de Pete Kelly’s blues. Del argumento no me acuerdo, pero era algo de gangters y jazz, en plan serie b de los años 50. No es lo que más importa, de hecho. En toda serie B lo que cuentan son las ganas. Había jazz, porque los protagonistas son un grupo de jazz de los de carretera y manta. Ya digo que no me acuerdo cómo se conectaban con la mafia, pero supongo que tenía que ver con la noche y las mujeres. Ahí leeréis el argumento.
Por lo que sí recuerdo Pete Kelly’s blues es por dos cosas. Una, que en una de esas noches de carretera y manta, los integrantes de la banda se la pasan cantando Bye Bye Blackbird como si fuera la canción más heavy del jazz en plan juerga nocturna. La otra cosa por la que recuerdo la película tiene nombre, apellidos y presencia: Ella Fitzgerald.
Ella Fitzgerald sale cantando en el club de jazz que regenta. Tiene líneas de diálogo. Y ciertamente que Ella tenía una presencia, más allá de la rotundidad de sus formas, que a uno le acaban por convencer. También está su socarronería en forma de media sonrisa, la misma media sonrisa que tiene en la carátula de este disco junto a su amigo Louis Armstrong.
El director era director y protagonista, Jack Webb. No se conocen grandes logros por parte de este buen hombre que pronto se pasaría a la televisión. Sí que suenan estos nombres: Lee Marvin, Edmond O’Brien, Peggy Lee. Jayne Mansfield en un pequeño papel. Y para el aficionado al jazz tienen que sonar otros, como Herb Ellis o Nick Fatool, con diálogos incluso en la película.
La voz cantante la llevan Peggy Lee y Ella Fitzgerald. La banda la forman gente competente del jazz de la época: Joe Venutti, Maty Malnock, Don Abney, Teddy Buckner, gente que ora grababa discos de jazz en la West Coast como también se metían en un estudio para grabar bandas sonoras en las orquestas de las grandes compañías. Aunque no fueran de jazz.
Pero la película se ve con todo agrado. Ya sea por el ambiente que se crea cuando la noche se emparenta al jazz, por esa atmósfera de serie B, por la carretera y manta, por los gangsters o por ver un momento a Jayne Mansfield. En ese momento ésa es tu película y nadie te la puede arrebatar. Ésta es una de esas películas de las que uno tiene que erigirse en guardián. Por el bien del cine B, por el bien de los olvidados del cine, por el bien de una noche en un club de jazz. Porque nadie se acuerda de películas como éstas.
5 comentarios
francisco alegre, alias Otis Spain -
A propósito: la discografía de Miss Lee es abundante, y lógicamente, hay algo de morralla si somos muy jazz-puretas (cuerdecitas y más cuerdecitas). Pero, amigo, junto a tipos como Barney Kessell es que parte la pana. Y (te lo dice un pianista y guitarrista sufrido) a nadie le amargan dulces standards como "You're Blasé", "The Man I Love" o "I've Grown Accoustomed to His Face", por una vez, sin el típico saxo intentando descubrir la pólvora: sólo esa voz que parece que la estás soñando, en lugar de escucharla...
Alvy Singer -
Zoe -
Saludos y gracias por linkear a Lo feo.
Olvido -
Besos reivindicativos
Erradizo -
Saludos